En octubre de 2024 se presentó en Villa Allende, una localidad de la provincia argentina de Córdoba, una iniciativa para acompañar y proteger a personas con Trastorno del Espectro Autista (TEA). La propuesta consta de pulseras azules identificatorias que incluyen los datos personales del portador y un número de contacto en caso de emergencia. La propuesta fue impulsada por Lorena Ríos, fundadora de la asociación civil Corazones Empáticos, y apunta a generar mayor conciencia social.
“El año pasado hubo varios casos de personas que se perdieron por el susto que les provocaron los ruidos de las fiestas de fin de año. No solo afectó a personas con autismo, también a quienes viven con esquizofrenia o Alzheimer”, explicó Ríos. Las pulseras de color azul —símbolo internacional del autismo—, buscan ser una herramienta simple pero efectiva para prevenir situaciones de riesgo y facilitar la asistencia inmediata.
La propuesta se suma a otras acciones que Corazones Empáticos desarrolla en la ciudad, como la colocación de pictogramas en espacios públicos, caminatas y charlas en escuelas y clubes, con el objetivo de fomentar entornos más accesibles y empáticos.
+ INFO: Las vacunas salvaron seis vidas cada seis minutos en los últimos 50 años



