La inclusión laboral de personas con autismo es un desafío global, con tasas de empleo significativamente bajas en comparación con la población general. En este contexto, Specialisterne España surgió como un referente que propone un modelo innovador para facilitar la incorporación de personas con TEA al mercado laboral.
Specialisterne, fundada en Dinamarca en 2004, basa su éxito en un proceso de selección que va más allá del currículum y las entrevistas tradicionales. José Segundo, CEO de la empresa, explica: “intentamos averiguar cuál es el conjunto de habilidades especiales, competencias personales y profesionales, intereses y necesidades de cada persona”. Este enfoque permite identificar talentos en áreas como tecnología, ingeniería o análisis de datos, donde la atención al detalle, la concentración prolongada y la memoria excepcional son altamente valoradas.
Una vez seleccionados, los candidatos participan en programas de formación gratuitos que simulan entornos laborales reales para mejorar sus habilidades técnicas y sociales. “Les enseñamos a trabajar en equipo, a comunicarnos de manera efectiva y a manejar las herramientas que necesitarán en su trabajo”, señala Marta Mas, responsable de Formación.
El impacto positivo de esta iniciativa se refleja en casos como el de Casa Batlló en Barcelona, donde más de 80 personas neurodivergentes desempeñan roles en atención al visitante y gestión. Además, Isabel García Mora, del Grupo Santander, comenta: «La inclusión de personas con autismo transformó nuestra cultura corporativa. Aprendimos a valorar las distintas perspectivas y habilidades, lo que impulsó la innovación y el rendimiento de nuestros equipos».
Con presencia en 26 países y más de 10.000 personas autistas empleadas a nivel global, Specialisterne expande su misión para cerrar la brecha de inclusión laboral y demostrar que la neurodiversidad es un valor añadido para las organizaciones y la sociedad en general.
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