Ante la peor sequĂa que ha azotado a Brasil en dĂ©cadas, el gobierno brasileño estudia la posibilidad de volver a ajustar los relojes. La medida, que ya fue implementada en el paĂs durante dĂ©cadas, busca aliviar la presiĂłn sobre el sistema elĂ©ctrico, fuertemente golpeado por la escasez de agua y los devastadores incendios forestales que asolan el territorio.
El ministro de Minas y EnergĂa, Alexandre Silveira, confirmĂł que la opciĂłn de reimplantar el horario de verano estĂĄ siendo analizada a fondo. La idea es aprovechar al mĂĄximo las horas de luz solar para reducir el consumo de energĂa en las horas pico y asĂ evitar posibles racionamientos.
El horario de verano, que fue suspendido en 2019 por el gobierno anterior, consistĂa en adelantar los relojes una hora durante los meses mĂĄs cĂĄlidos del año. Aunque su efectividad en el ahorro energĂ©tico ha sido objeto de debate, las actuales circunstancias extremas han llevado al gobierno a reconsiderar esta medida.
La combinaciĂłn de la sequĂa prolongada, que ha reducido significativamente el nivel de los embalses hidroelĂ©ctricos, y los incendios forestales que han afectado vastas extensiones de territorio, ha generado una crisis energĂ©tica sin precedentes en Brasil. La vuelta al horario de verano se presenta como una posible soluciĂłn para hacer frente a esta situaciĂłn y garantizar el suministro elĂ©ctrico a la poblaciĂłn.



